Kimberley es Kimberley y por eso es el campeón. Peñarol lo tenía todo cocinado. Ganaba 1 a 0 con gol de Prado, una de las figuras, pero en el descuento el "Dragón" llegó al empate y en los penales no perdonó. Peña tuvo tres chances para ganar pero siempre apareció Morata para detener los penales y terminar ganando 9 a 8. Ampliaremos